Las aventuras del Capitán Chinaski
Capitulo 4.
Millas Marinas
Tenemos agua y comida para los próximos dos días. Pero eso no es muy alentador cuando el trozo de tierra más cercano, la isla de la Calavera Blanca, aún dista al menos tres jornadas de buen viento. La situación es más complicada cuando llevamos dos días y tres noches, maldita sea, postrados en el mismo mengajo de quietud de agua. En algún lugar, a medio camino entre el meridiano de Silver Jones y la Gruta del Escorpión Gris.
Ya el contramaestre Pool Nelson, había insistido en no tomar esta ruta. Dice que La Pena Negra entristece siempre al surcar estas latitudes. Pero yo, por todos los diablos, tozudo de nacimiento, nunca he hecho caso de las viejas leyendas que maldicen estas millas marinas.
-Paparruchas, Sr. Nelson-.
Y aquí estábamos, como anclados en un mar difunto. Todos los hombres, observando el atardecer en cubierta. El miedo puede olerse en sus ojos. Pendientes de las nubes y el horizonte, de la puesta del sol, de algún indicio de viento o brisa que hinche las velas de La Pena Negra, que ha entristecido de golpe como vaticinó Nelson. Hay una bruma que lo envuelve todo, un algo invisible que parece el opio del último sueño.
El Sr. Lester, nuestro cocinero, maldice ente los cacharros al Contramaestre. También los hombres, en cubierta, culpan al Sr Nelson por habernos arrastrado nuevamente por corrientes desfavorables. Al Sr. Nelson parece no importarle. Dócil y paciente, camina entre los muchachos hacia a mi, cruza el puente de mando. No puede respirar con normalidad. El bochorno obstruye sus pulmones, y sin embargo, su rostro sudoroso y enrojecido sonríe al acercarse a mí. Bebe de su taza de té mirando al infinito. Postra su mano sobre mi hombro, y me susurra:
-Tranquilo, Capitán. Saldremos de esta.
Damían Varea
Millas Marinas
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- Publicado:
- el domingo, 17 de agosto de 2008
- Categoría:
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17 de agosto de 2008, 20:40
Gracias por devolverme la vista, sólo decirte que sólo publico en el blog "Paseando por terra", no tengo tiempo de mas y aparte de algo de música, en "la Mirada", no escribo y el otro blog,"Akelarre" es de una comunidad que formamos que ya nadie publica ;) es una pena, yo era la única bruja mala , Maligna, jajajja
La vida y la muerte de los blogs... efímero :P
Besos - 17 de agosto de 2008, 20:50
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28 de agosto de 2008, 21:29
"Cierra uno tras de sí la puertecita de la infancia y penetra en un jardín encantado. Hasta sus mismas sombras tienen un resplandor de promesa. Cada recodo del sendero posee su seducción. Y no a causa del atractivo que ofrece un país desconocido, pues de sobra sabe uno que por allí ha pasado la corriente de la humanidad entera. Es el encanto de una experiencia universal, de la que esperamos una sensación extraordinaria y personal, la revelación de un algo de nuestro yo.
Llenos de ardor y de alegría, caminamos, reconociendo las lindes de nuestros predecesores, aceptando tales como se presentan la buena suerte y la mala -los puntapiés y las perras chicas, como reza el adagio-, el pintoresco destino común que tantas posibilidades guarda para el que las merece, cuando no simplemente para el afortunado. Sí; caminamos, y el tiempo también camina, hasta que, de pronto, vemos ante nosotros una
línea de sombra advirtiéndonos que también habrá que dejar atrás la región de nuestra primera juventud".
(Joseph Conrad, La línea de sombra).
¿Ha leído esta pequeña novela, capitán? Se la recomiendo.
Muchas gracias por descubrirme. Vuelva cuando quiera, siempre será bienvenido en mi humilde buque fantasma. - 28 de agosto de 2008, 22:14
44 pergaminos: